Que la desinfección de los entornos donde convivimos es unos de los elementos claves para protegernos del virus, no cabe dudas, y para ello debemos iniciar el proceso de forma metódica asegurándonos la mejor limpieza de las superficies, ya que de ello dependerá la eficacia de la desinfección.  

Para desinfectar una superficie debemos  conocer previamente el tipo de suciedad que pretendemos eliminar al objeto de aplicar el producto químico más adecuado, ya que cuanto mas apropiado sea el producto más eficaz y fácil será la limpieza y en consecuencia  optimizaremos  la acción desinfectante.

No todos los productos químicos tienen las mismas características por ello, la necesidad de conocer sus diferencias para cada tipo de superficie.

Según su comportamiento para disolver la suciedad tenemos tres tipos.

-detergentes alcalinos que eliminan principalmente la suciedad grasa (que puede ser mineral o animal)

-detergentes ácidos que eliminan la suciedad mineral como es el sarro, restos de cal, óxidos.

-detergentes neutros cuya finalidad es eliminar la tensión superficial y la suciedad que contiene poca o nula grasa.

“En Abrilimp limpiamos para proteger la salud de las personas”