Los utensilios y herramientas  adquieren un total protagonismo en la prevención de la infecciones  en la cocina.

El Paño y la bayeta  ha sido siempre uno de los utensilios con mayor protagonismo en las cocinas, tanto domésticas como industriales. Junto con cuchillos y superficies de cortar, comparte espacio con alimentos de toda clase y, en consecuencia, con posibles riesgos alimentarios derivados de la presencia de patógenos. Por su capacidad para actuar como transportador de gérmenes. Según un estudio reciente, buena parte de los paños de limpieza usados en restaurantes y cocinas colectivas del país contienen niveles altos de bacterias, fruto de una mala higiene y de contaminaciones cruzadas.

No es suficiente con lavar de manera frecuente los paños para prevenir la contaminación   en la cocina porque son, junto con las manos y otros utensilios de uso habitual, una de las principales vías de formación y propagación de bacterias patógenas en los alimentos. Son productos que, pese a resultar prácticos, comportan la formación de microorganismos. Cualquier descuido en su higiene se puede traducir en el paso de bacterias a las manos y, de éstas, a las superficies y al equipo de trabajo. En abrilimp soluciones integrales  somos conscientes de la importancia de este soporte para evitar contaminaciones, por ello llevamos a cabo continuos procesos de desinfección de estos soportes.

Según un estudio de la Agencia de Protección Sanitaria, el 56% de los paños analizados en 120 establecimientos  en el país contienen niveles inaceptables de bacterias, sobre todo enterobacterias, E.coli, Staphylococcus aureus y Listeria, indicadores de la aplicación de medidas higiénicas inadecuadas.

Abrilimp Soluciones integrales realiza  limpiezas de desinfección en cocinas,  asegurando  tranquilidad y confianza a nuestros clientes.

El paño de cocina puede ser un transmisor de infecciones.

El paño de cocina puede ser un transmisor de infecciones.

Reducir riesgos.

A pesar de que las inspecciones realizadas por las autoridades sanitarias  han demostrado que se siguen con rigurosidad la mayoría de las pautas de higiene más complejas, constatan sin embargo que se obvian otras más simples, como la limpieza de los paños y bayetas. Cualquier resto de comida puede almacenar gérmenes. Los trapos que están en contacto con platos u otros utensilios requieren pautas de cocina muy específicas.

 

 

 Recomendaciones para evitar los riesgos derivados de su uso son:

  • Separar los paños que se utilizan en las áreas donde se manipulan alimentos crudos, de las zonas de alimentos cocinados.
  • Desinfectarlos con frecuencia (no sobrepasar las 24 horas de uso), aunque ello no es garantía de que las bacterias no vuelvan a crecer.
  • No secarse las manos con un paño que antes se haya usado para manipular alimentos crudos, como carne o pescado, estaremos provocando una contaminación cruzada.